Karol Sevilla. Con 16 años y diez de carrera actoral en México, es la protagonista de Soy Luna, la nueva serie de Disney Channel que se estrenó en toda Latinoamérica el 14 de marzo y promete ser un éxito mundial, como ocurrió con Violetta
Desde que tengo recuerdos juego frente al espejo a decir: ‘Soy Karol Sevilla y estás viendo Disney Channel’. ¡Todavía no puedo creer que ahora lo hago de ve-ras!”, confiesa la joven mexicana protagonista de Soy Luna, la nueva apuesta del canal juvenil que se estrenó en toda Latinoamérica el 14 de marzo, y que al igual que su predecesora, Violetta, promete ser un boom a nivel mundial. ¿Algunas cifras del incipiente éxito? Su disco se convirtió en álbum de platino, con más de 30 mil copias vendidas el día de su lanzamiento. Y Alas , la pegadiza cortina musical de la serie, ya cuenta con 8 millones y medio de visitas en YouTube.
“Luna es muy distinta a Violetta. Es una superheroína muy extrovertida, divertida y valiente, que lucha por sus sueños. Aunque a veces cae, se vuelve a levantar. Me siento muy identificada con el personaje” , sintetiza la actriz, que durante un año residirá en la Argentina para grabar la serie.

DE MEXICO AL MUNDO.

“Toda mi vida me preparé para este momento”, asegura la nueva figura de Disney, que nació hace 16 años en el barrio de Iztacalco, en Ciudad de México. Hija de Carolina y Javier –ama de casa y electricista–, y hermana menor de Mauricio –estudiante de Educación Física–, Karol se inició en el mundo artístico hace diez años.
“Mi abuelita, que ya falleció, fue mi cómplice. Ella me empezó a llevar a las audiciones” , recuerda. El mismo día que la vio partir, la aceptaron en el Centro de Estudios Actorales de Televisa (la mayor cadena de televisión mexicana), donde comenzó su maratónica carrera, participando en importantes telenovelas y obras teatrales de su país. Hasta que el año pasado “casi de casualidad” le llegó el proyecto que la catapultaría a la fama internacional.
“Una amiga me contó del casting de Soy Luna, que ya había comenzado, pero pude entrar en las instancias finales”, relata, y admite con picardía: “Fue difícil. Tenía que actuar, cantar, bailar ¡y patinar!, que no era mi fuerte . Cuando me preguntaron si sabía¡ dije que sí, sin dudarlo! Fue una mentirita piadosa... Pero todo salió bien. Pasé varias instancias, hasta que armé las maletas y me tomé el primer avión de mi vida para venir al casting de Argentina. Hice las pruebas y cuando terminé me dijeron: ‘Muchísimas gracias. Que tengas un buen regreso a tu país?’.
Y me quedé como ‘¡¿what?!’. Pero a la semana me llamaron y me dieron la buena noticia. ¡Me puse a llorar , porque nunca imaginé que iba para Luna!” . Y al igual que su personaje en la serie, dejó su país natal y se vino a vivir a Buenos Aires. “Le voy a estar eternamente agradecida a mi mamá, que dejó todo para acompañarme”, confiesa. ¿Cómo resultó su experiencia en la Argentina?
“Fue increíble mudarme a otro país, aunque también difícil, porque me tuve que acostumbrar a una nueva casa, a la forma de hablar, a la comida ¡que es mucho me-nos picante que en México! Aunque reconozco que quedé

fascinada con la milanesa a la napolitana de acá” , cuenta. Ahora, claro, se tendrá que acostumbrar a una vida más nómade, ya que la esperan giras de promoción por toda Latinoamérica y Euro-pa.
“Todavía no soy consciente, pero sé que estoy en algo muy grande. Por suerte, tengo una gran familia que me quiere y me regaña cuando es necesario, para que no se me olvide quién soy y no se me suba el personaje a la cabeza. Quiero disfrutarlo, subir escalón por escalón y no perder la humildad”.