A partir de que Jimena Barón decidió instalarse en la casa de Daniel Osvaldo en Lanús, los ex protagonizan en las redes una apasionante historia de idas y vueltas. Lo cierto es que sus publicaciones dan indicios que alimentan la posibilidad de una “nueva oportunidad”.
La cantante de La Cobra ya se animó a hablar de “tentaciones” y da pistas que llevan a los seguidores a especular sobre una relación mucho más “amigable” que una simple convivencia, como largas noches de vino y charlas.
Por su parte, Daniel Osvaldo parece haberle puesto punto final al misterio con una frase que podría resumir el estado actual de su vínculo con Barón. El futbolista publicó en sus historias de Instagram una frase que pertenece a la canción Siete crisantemos de Joaquín Sabina: “Lo bueno de los años es que curan heridas. Lo malo de los besos es que crean adicción”.
Al principio, la intérprete negaba cualquier tipo de acercamiento con el delantero y aseguró que dormían en cuartos separados para que no hubiera sospechas. “Esto es convivencia parental, che”, respondió cuando una seguidora le consultó si había tenido sexo con Osvaldo.
Pero en las últimas horas, los usuarios volvieron a criticar a la cantante porque subió una imagen donde se la ve luciendo un jogging gris de gran tamaño. Al parecer la prenda correspondería al jugador de Banfield. Otra prueba más de la gran cercanía que está cosechando la ¿ex? pareja.
Los pantalones by Roberto”, “No me digas nada, ¿le robaste los pantalones a Roberto?”, “Aguanten los lompas de Roberto”, fueron algunos de comentarios que aprueban la vuelta de esta relación. Pero entre la decenas de mensajes se filtró uno muy duro contra la artista.
“¿Qué pasó con el patriarcado?”, disparó una usuaria, cuestionando su militancia feminista. Pero Jimena, lejos de pasar por alto ese comentario, decidió contestar. “Yo tampoco estoy de acuerdo conmigo en algunas cosas, a veces hago lo que quiero y a veces hago lo que puedo, les vida es un poco así ¿no?”, se preguntó.
“Por ejemplo, el fiscal Fernando Rivarola catalogó una violación en patota (6 hijos de la mier...) como ‘desahogo sexual’. Ahí ya tenés 7 hijos de la mismísima mier... y lamentablemente son muchísimos más. Eso pasa...”, respondió en otro de sus mensajes. Mientras tanto, la también actriz todavía no termina de cómo seguirá su vida sentimental.
Esta convivencia, generó puntualmente un fuerte debate en las redes. Según la explicación de Jimena, lo hizo porque su hijo, Morrison, quería tener a sus dos padres juntos durante la cuarentena. No obstante, los días pasan y ella continúa instalada allí. Todo parece indicar que la relación entre los dos se afianza cada vez más, más allá de la tormentosa separación que protagonizaron en 2015.
Sin embargo, lo que podría ser una buena noticia se convirtió en foco de cuestionamientos ya que los usuarios le recordaron las fuertes acusaciones de violencia de género que hubo de parte ella hacia él tras la ruptura.
