Las declaraciones de Macri y la pseudo corrección política

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Hoy a la tarde en mi twitter comencé a leer repercusiones de las declaraciones de Mauricio Macri sobre los lamentables hechos acaecidos tras el intento de desalojo en el predio de Villa Soldati. Desde todo el arco político se lo acusaba rabiosamente de xenófobo, discriminador, anti inmigración y quien sabe cuántas cosas más, faltaba poco para que algún político dijera que habría descubierto al fallido imitador de Freddy Mercury hacer saludos nazis o tener una copia de Mein Kampf en su escritorio. Sorprendido por tanta repercusión negativa en un amplio espectro político comencé a buscar frenéticamente las declaraciones del ultraderechista xenófobo, esperando encontrar evidencia incontrastable y horrorizante de su abierto apoyo a las teorías de limpieza racial promulgadas por Joseph Mengele. Sin embargo luego de hurgar en múltiples portales lo único que encontré fue esto: http://www.26noticias.com.ar/macri-atribuye-tragedia-en-soldati-a-la-inmigracion-descontrolada-que-uso-armas-tumberas-en-desalojo-122928.html http://cadena3.com/contenido/2010/12/09/67371.asp Aparentemente dentro de sus declaraciones la única parte en la que el Jefe de Gobierno Porteño hace referencia a la inmigración, expresa textualmente lo siguiente: “Hay una inmigración descontrolada, porque junto a gente honesta que vino a trabajar desde países vecinos, también hay delincuentes que se aprovechan de la necesidad de la gente" Ante lo cual me pregunto, que parte de esta sencilla expresión que describe dos caras de una misma moneda, la inmigración, es xenófoba?. Es acaso una mentira el hecho de que haya una parte que viene a delinquir, aunque sea solamente el 5%?. Es por definición fascista y xenófobo pretender tener un mínimo de racionalidad migratoria?. Increíbles me resultaron también algunas repercusiones absolutamente desmesuradas, por ejemplo Lubertino diciendo que “Macri cometió un delito con sus expresiones” o mas de un analista manifestando que la Constitución dice que Argentina esta “abierta a todas las personas que quieran habitar suelo argentino” como si esa declaración de principios que hace el preámbulo obliterara todo derecho del gobierno a sencillamente hacer un chequeo de las intensiones o los antecedentes que tiene una persona cuando decide venir al país, algo que ocurre en todo país normal racional y coherente del mundo. Aquí en Argentina existe una serie de prejuicios ideológicos que supone que es lógico tener universidades gratuitas a las que vienen extranjeros sin pagar un solo centavo y se van o tener hospitales públicos en los cuales se atiende a personas que vienen en tours médicos desde países extranjeros y no se los controla o se cobra un solo centavo, como si esta situación no fuera inédita en el mundo. La inmigración desde países limítrofes además de ser una realidad, es un hecho absolutamente positivo y necesario para la economía y el desarrollo argentino, nadie con seriedad podría proponer evitarla, pues nuestro país al igual que hace cientos de años sigue nutriéndose de la inmigración, argentinidad e inmigración son sinónimos.  Sin embargo, para quienes se muestran horrorizados no ya ante expresiones realmente xenófobas o discriminatorias ni tampoco frente a la proposición de políticas restrictivas en materia inmigratoria, sino ya directamente hacia toda frase en la cual se mencione la palabra “inmigración” y “control” juntas sería bueno que apliquen el mismo criterio a la hora de juzgar a los países extranjeros, díganlo de una vez, Rodriguez Zapatero es un Fascista, o Lula y su intento por racionalizar lo que pasa en las favelas también. Que intenten ir a Cuba y ser atendidos por la medicina pública sin pagar a ver que les dicen. No debe existir alguien mas interesado en que se evite el ingreso de personas que vengan a delinquir que ese otro 95% de personas que vienen a trabajar a nuestro país y hacen la Argentina día a día. Sobre los hecho lamentables que ocurren se pueden decir muchas cosas sobre las responsabilidades compartidas, pero no se puede negar que hechos como este pone en serio cuestionamientos a quienes defienden la inacción del estado como única alternativa. Esta clarísimo que hay situaciones en las cuales debe elegirse el mal menor y frente a grupos armados que van a desalojar a los tiros a los ocupantes, debe anteponerse el Monopolio de la fuerza que lo debe tener el estado.